“Cualquier madre que esté intentando combinar trabajo, clases e hijos debería ser alabada, no humillada”, lamentó Marcella Mares, mamá y alumna
“Cualquier madre que esté intentando combinar trabajo, clases e hijos debería ser alabada, no humillada”, lamenta Marcella Mares, estudiante californiana y madre de un bebé de diez meses.
Sus palabras se dirigen a uno de sus profesores; el pasado 23 de septiembre, durante una clase online, éste le prohibió amamantar a su bebé y la discriminó por ello delante de todos los alumnos.

Marcella Mares, estudiante, amamantando a su bebé
Antes de la clase, el profesor había anunciado por email que era obligatorio mantener encendidos el micrófono y la cámara para comprobar la asistencia.
Marcella le comentó que quizás tendría que amamantar a su hija en alguna ocasión, y que durante esos momentos los apagaría para tener mayor intimidad. “Esto no es lo que deberías hacer en clase”, dijo el instructor.
Ella no contestó a aquel último correo y asistió a clase.
Al empezar la sesión lectiva, con los alumnos conectados, el profesor dijo que había recibido un “email muy extraño” de una estudiante, en el que esta indicaba que necesitaba hacer “cosas inapropiadas” durante la clase.
“Tienen que dejar las distracciones a un lado o ser creativos cuando sus hijos los necesiten y prestar toda la atención a mi clase”, dijo él.
La reacción de Marcella
«Quienes me conocen, saben cómo me dolió eso», publicó Marcella en Instagram. “Me humilló delante de toda la clase […] Estamos hablando de un niño, no de un teléfono o una televisión o cualquier otra cosa».
Ella misma presentó una queja en su escuela Fresno City College y, ante las críticas generalizadas, recibió una disculpa del profesor. «Puedes amamantar a tu hijo cuando necesites», añadió.
Marcella considera que la directiva escolar fue poco contundente, y esperaba que hubieran otras acciones que hicieran repensar el papel de ese profesor en el colegio.
¿Qué dice la ley californiana sobre la maternidad en escuelas?
La ley en California ampara a estudiantes que ejercen la maternidad o paternidad.
«Amo a mi bebé y elegiré su salud antes que cualquier otra cosa”, dijo Marcella.
Discriminación por amamantar
La discriminación por amamantar se vive en otros espacios, no sólo en los centros escolares.
Un avión también puede llegar a ser espacio de humillación para madres y sus bebés. ¿Te ha ocurrido algo así?
Portada: Marcella Mares @cellapage_