La primera en ser tatuada por este novedoso artefacto fue la estrella de televisión holandesa Stijn Fransen
Uno de los beneficios de la llegada de la tecnología 5G es ponerle Internet a diferentes artefactos. Las posibilidades que brinda este tipo de conexión son muy grandes: desde poder llamar a una heladera, hasta controlar un robot tatuador a larga distancia.
Sí, hacer tatuajes a larga distancia ahora es una realidad gracias a un proyecto de la empresa de telecomunicaciones T-Mobile Netherlands. La máquina fue diseñada a medida y luce como un brazo humano, pero hecho de metal.
La estrella holandesa Stijn Fransen fue la primera en testar al robot. Ella se hizo el primer tatuaje del mundo remoto a través de un brazo robótico. Wes Thomas, un tatuador holandés, fue quien hizo el diseño del tatuaje y quien controló a la máquina desde la distancia.
Para hacer el tatuaje se empleó un algoritmo de aprendizaje automático para reconocer la ubicación del brazo de Fransen; después de esto, la maquina situó el lado específico donde la mujer iba a llevar la nueva marca en su piel para comenzar a hacer su trabajo. El robot fue construido y programado por el técnico londinense Noel Drew en pocas semanas.
¿Cómo funciona este robot tatuador?
A pesar de que la inteligencia artificial puede reemplazar procesos humanos, este robot tatuador necesita de la ayuda de una persona para funcionar. El brazo mecánico incluye una antena 5G a través de la cual recibe información enviada por un tatuador humano de forma remota.
También te podría interesar – El primer hotel espacial del mundo podría ser una realidad en 2027 🤯 🚀
Una vez diseñado el robot tatuador e instalada la antena de 5G, le cargaron un programa de inteligencia artificial. Se trata de un software con un algoritmo automático. Esto significa que es de «aprendizaje sin supervisión». Así, la maquina puede «aprender» cómo funcionar de forma autónoma sin que las personas la controlen todo el tiempo.
“Cada parte de la construcción fue considerada y comprada específicamente o diseñada, desarrollada y fabricada internamente desde cero”, manifestó Noel Drew en una entrevista con el medio PCMag.
El programador también contó que durante la sesión, un potenciómetro monitoreaba la superficie del brazo de Fransen para asegurarse de que la aguja no perforara excesivamente su piel.
El proyecto fue bautizado como ‘The Impossible Tattoo’. Fue parte de una campaña de marketing para la compañía de telecomunicaciones T-Mobile Netherlands. Su objetivo es poder comercializar esta máquina tatuadora próximamente.
El peligro de los algoritmos que tienen estos tipos de robots
A pesar de que este es un gran avance tecnológico, la inteligencia artificial usada para entrenar a esta máquina tatuadora, aún necesita algunos ajustes.
Como contamos en este artículo los algoritmos automáticos pueden aprender cosas que no son muy útiles o positivas. Este sistema es una innovación relativamente nueva: antes de 2020, los algoritmos utilizaban principalmente el aprendizaje supervisado por humanos.
Una investigación reciente puso en evidencia que un bot, utilizado para autocompletar imágenes, creaba fotos con sesgo machista. El análisis detectó que cuando un algoritmo debe crear el cuerpo de una persona basándose en una imagen de su rostro, ejerce un fuerte sexismo: si es hombre, en muchas ocasiones le pone un traje de gala; pero, si es mujer, un traje de baño o un top corto.
Los investigadores que descubrieron este hecho pidieron una mayor transparencia a las empresas que están desarrollando estos algoritmos. Solicitaron que sean abiertos y que dejen que la comunidad académica continúe con sus investigaciones para mejorarlos. Su intención es que se logre reducir el sexismo en estos procesos de inteligencia artificial.
También te puede interesar:
Portada Unsplash @gearfilms
